Distancia: 40 Km
Terreno: Mixto
Dificultad: Puerto de Montaña
Esta ruta la realizó Valentin con
nuestro amigo Alberto de Navafría (Segovia) el pasado sábado 2 de Julio. El día
fue muy soleado y caluroso, aunque a esas alturas de la Sierra de Guadarrama no
se siente tanto el calor.
La ruta
sale desde la
población de Navafría
a 1.200 m
de altitud, y
el objetivo era
alcanzar la cumbre del
Pico del Nevero, situado
en el límite de la
Comunidad de Madrid con la
provincia de Segovia, a 2.209m de altitud.
Ya desde el comienzo y viendo el
perfil de la ruta, se esperaba que la jornada fuera dura, pues había que subir durante
20km por pistas
forestales con bastante
desnivel llegando incluso
a zonas del 12% con mucha piedra suelta, hasta completar la cumbre del
Nevero. Lo que no
se esperaban fue el grupo de cientos de “moscas ciclistas” alrededor de la
cabeza y
de la cara que se empeñaron en acompañarles, lo que complicó aún más los primeros 10 km.
Pero afortunadamente hubo cosas
más agradables como encontrarse un zorro cruzando el camino escasos metros de
las bicis, un grupo de
caballos en libertad
nada más hacer cumbre en La
Lagunilla (1.879 m),
nombre que recibe
dicha cumbre por
la existencia de una laguna que sirve de bebedero para los
caballos, vacas, corzos y jabalíes de la zona.
El camino sigue subiendo hasta
llegar a los 2000 m de altura, donde los
pinos y la vegetación
es más baja y comienzan
a surgir praderas verdes donde pastan tranquilamente las vacas
de la zona, llenas de flores y agua que surgían por todas las partes, realmente
precioso.
Poco a poco la vegetación
cambiaba para dar lugar a matorral bajo, como
consecuencia de la altura ganada ya más cercana a los 2100 m. En algunas
zonas el camino casi desaparecía y era más
la intuición junto
con el GPS los que
marcaban el camino.
Las vistas espectaculares, el
nacimiento de un río
ayudó a refrescarse
y beber agua
fresca para dar el último empujón y conseguir la cima por el
lado Oeste de la montaña. El gran esfuerzo de llegar a la cima fue compensado
con un buen bocata y fruta, que sentaron como un premio de montaña de la Vuelta
Ciclista.
Tras las fotos pertinentes y el
gran momento disfrutando de unas vistas espectaculares, la ruta seguía durante
otros 20km, pero
ya de bajada
continua hasta llegar
de nuevo a
Navafría, en este caso por el
lado Este de la montaña.
La bajada aun siendo obviamente
más rápida que la subida, exigía un buen control de la bici para evitar
regueros y piedras sueltas del camino, que amenazaban con provocar alguna que
otra caída de la bici.
Una vez abajo, como no podía ser
de otra manera, el momento de satisfacción se celebró con unos botellines
fresquitos en la piscina
del pueblo, reponiendo
fuerzas, disfrutando de
buena compañía y comentando la experiencia vivida.
Aquí la tenéis por si os animáis a hacerla, os gustará Ruta#8